jueves, 4 de octubre de 2012

Continuando

Últimamente estoy notando unas sensaciones un poco extrañas. Entre melancolía, felicidad máxima, tristeza desesperada y necesidad. En ocasiones se juntan todas a la vez. Otras sólo se ubica una de ellas en mi cabeza y controla todo, por suerte normalmente la felicidad.
Aún así sigue siendo curioso ver cómo lo que echabas de más un día lo echas de menos, y al revés. Esta capacidad de cambiar sensaciones y necesidades me agota y me gustaría tomarlo como algo normal, pero no consigo que deje de afectarme.

Dicho esto, seguimos avanzando poco a poco en el próposito principal por el que este blog existe. De hecho cada vez escribo menos y eso es tan positivo como negativo.
Positivo porque quiere decir que ese gran motivo va desapareciendo (yo lo considero erradicado... pero en mi ser no existe esa palabra como sinónimo de olvidar, así que semi-olvidado).
Negativo porque cada vez me apetece más escribir de todo, cualquier cosa, nada... pero tengo menos tiempo.

 Igualmente, aunque ponga estas cosas, lo cierto es que voy progresando adecuadamente como en el colegio.

Y es que esto no es otra cosa que volver a empezar desde los inicios. Y los inicios nunca fueron fáciles. Y sí, no es un inicio como tal, pero también es continuar empezando. O empezar a continuar, depende como se mire.

Porque la vida puede ser maravillosa... y puede continuar siéndolo.